Institut Jules Bordet
Contexto
El Instituto Jules Bordet destaca por su diseño lógico y organización clara. El edificio, con forma de paralelepípedo, está estructurado alrededor de un eje central que facilita todas las circulaciones verticales y cuenta con seis patios que permiten la entrada de luz natural. Esta aparente simplicidad se convierte en un modelo eficiente que optimiza las rutas de atención al paciente; reduce las distancias a pie entre el personal y los pacientes, y promueve la interacción continua entre los profesionales, favoreciendo la atención multidisciplinar y la rápida transferencia de los resultados de la investigación a la práctica clínica.
La joint venture entre Brunet Saunier, Archi2000 y TPF Bruselas-París ha capturado la visión del Instituto Jules Bordet y la ha materializado en un edificio que apoya el enfoque multidisciplinar integrado característico de la institución.
El nuevo edificio ofrece un entorno tecnológico avanzado y, al mismo tiempo, emana una atmósfera de calma y serenidad. La cuidadosa selección de materiales, con un uso extensivo de madera, paletas cromáticas naturales, abundante luz natural y vistas despejadas, contribuye a que este edificio de 80.000 m², distribuidos en nueve plantas, mantenga una escala humana que tiene un efecto tranquilizador en pacientes, visitantes y personal.

Alcance
Con una superficie de 30.000 m², la fachada del centro hospitalario necesitaba cumplir con la exigente normativa belga en materia de aislamiento térmico, por lo que la obra necesitó la instalación de un muro costina mixto, compuesto de madera y aluminio.

Reto
La gran complejidad técnica de esta envolvente rectilínea reside en la integración de diferentes sistemas que en muchos casos conviven en la misma cara de la fachada.
Más del 40% de la superficie se concentra en sus seis patios interiores, todos ellos con diferentes geometrías.
El edificio cuenta con 4.000 estores integrados en la fachada y conectados con el sistema central de domótica.
